La vendimia 2016 ya es una realidad en nuestra bodega Lagar de Cervera. Con la recogida de la uva Albariño de las fincas Limeres (O Rosal) y Viñadeiro (Cambados) hemos iniciado la campaña más tardía y, posiblemente, una de las más exigentes de los últimos diez años en Rías Baixas.
Las fuertes lluvias primaverales, así como la posterior sequía y calor veraniego han condicionado notablemente una cosecha que, desde la brotación, ya acumulaba quince días de retraso con respecto al año pasado. Afortunadamente, gracias al innovador sistema de regadío implantado en nuestro viñedo y al laborioso cuidado de nuestro equipo durante todo el ciclo, hemos obtenido unas uvas de una magnífica calidad, que sobresalen especialmente por su perfecto estado sanitario apesar del gran riesgo de enfermedades. De esta forma, en Lagar de Cervera obtendremos una producción claramente superior a la de 2015, mientras que en el resto de la D.O. se estima un descenso aproximado del 20%.
Las previsiones meteorológicas para las próximas jornadas son muy positivas, lo que permitirá mantener un ritmo constante en la recolección manual de la uva así como su posterior transporte refrigerado y selección en la bodega.
Mientras, en las fincas propiedad de La Rioja Alta, S.A., Torre de Oña y Áster, nuestros técnicos analizan diariamente el estado de maduración de cada parcela para determinar el momento óptimo de iniciar la vendimia. Todo apunta que la semana viene podremos cortar los primeros racimos de Tempranillo en los viñedos de Cenicero.